Mientras el Dakar terminaba y el AMA Supercross intensifica los duelos, el MotoclubTT Guadalajara acudimos a Hosto, el llamado a la Bendición de Cascos.

A Honda se le fue de nuevo, con un claro dominio de KTM y el español Marc Coma, que se lleva su 5º Dakar con una excelente, pero sobre todo constantes actuación, como ya ha sido años pasados en base a una estrategia de continuidad más que de liderazgo –lo que claro le permite no cometer los errores de “abrir camino”- que sin duda le funcionaron, aunque tuvo muy de cerca a las rojas, con Barreda primero, quien tuvo un lastimoso fallo en su moto, pero con Goncalves ya casi para finalizar las etapas a muy pocos minutos, perdiendo oportunidad tras el cambio de motor que aseguraba su 2do lugar. Cierra el podio Price, desbancando al chileno Quintanilla, quien fue el máximo representante de América, y de América Latina en particular, felicidades, y también una felicitación a la multicampeona de trial y enduro, Laia Sanz, se metió al Top Ten.

Mientras tanto no nos podíamos perder la transmisión del Supercross en Anaheim con buenas carreras, ganando Cooper Webb en la Lites (y en donde por cierto no vemos ni una Suzuki- por algo será) pero donde sí están dominando las motos amarillas es en la 450, con Roczen a todo, pero ahora las cosas se pusieron más que interesantes, y caídas al por mayor, pero la nota se la lleva Reed con el  “laminazo” que saca a Canard pero sobre todo con la bandera negra al australiano, ya que fue con clara intención, posterior a la caída que sufrió ya que el de la Honda por error lo llevó al suelo  en una caída aparatosa y claro, Chad muy molesto le echó la moto a Trey, ya que el de la Kawa 22 venía haciendo muy buen papel.

Dejando la televisión y entrando a la acción, por fin después de meses de inactividad, y aunque entrando “fríos” nos subimos a la moto, nada más y nada menos que al ya tradicional paseo a Hosto, en donde se realiza una misa especial con La Señora del Favor, patrona del motociclista, así como la bendición de cascos.

Y lo hicimos de la manera extrema, bueno, los pilotos de motos dos ruedas; más de 50 participantes acudimos, mientras los cuatris y carritos se adelantaban por otro camino, 11 motos ingresamos a una ruta endurera. Pequeños atorones al principio y un par de caídas, mientras por grabar video me quedé atrás y se me cayó la cámara, así que a regresar caminando a buscarla, logrando hacerlo, pero ahora el cometido de alcanzar a los compañeros… y no tardé mucho pues estaban atorados en una pesada subida. Al llegar ahí y medio ayudar para que no se fuera una moto al barranco, pasé  y me atoré, increíble lo que me cansé en ese pedasito, y después de eso la moto ya no prendía, así que a echar patadas (¡para eso elegí una con marcha!), en fin, la moto no es la ideal para endurear, y uno chaparro y mal piloto, ya se imaginarán, y como dice Ponchito, “pero eso sí, uno a come y come”, y ahí es donde te acuerdas de no entrarle tan duro a los taquitos, pero se logró el cometido, con dos de tres caídas sin límite de tiempo, pero otros compañeros, sí que sufrieron y ni cómo ayudarlos, con trabajos podía conmigo mismo. Por supuesto entre todos hicimos labor de equipo y en particular agradezco a los que me echaron la mano, el “mecánico”, Ponchin y Alfaro, sin ellos quizás seguiría ahí adentro admirando el paisaje increíble que me tocó apreciar.

Llegamos, muy cansados después de un buen tramo de bajar y subir con mucho polvo, tierra y piedras sueltas, curvas muy cerradas pero eso sí, el río estaba divertidísimo, aunque con el calor y el cansancio llegué a Hosto (Hostotipaquillo) con ganas de nada, además ya se había terminado la misa, y aunque fuimos muy bien recibidos no nos tocó pasara el padre a bendecir por las miles de motos de todo tipo, “de pista”, chopper, turismo, moto taxis, de todo que se dieron cita, saludando en esta ocasión a muy pocos amigos, y a prepararnos para regresar (con apenas la gasolina necesaria) a Magdalena, donde unos chamorros para comer fueron el broche de oro del día.

Felicidades a Edgar “KBK” Pérez y su familia por la ruta y organización de su club El Buffalo, como siempre se sacaron un diez, aunque esta vez, sí sufrí.

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