La piloto veracruzana de Motocross, DOLORES ALEJANDRA HERNÁNDEZ ROMERO, ha regresado con gran ímpetu a la parrilla de salida tras dos años de ausencia por una caída que tuvo en la pista Angelito en Puerto Escondido, Oaxaca. Poco a poco ha ido recuperando su ritmo y su propósito es terminar en buena posición en la categoría N2 y subir de nivel sobre su Honda 250.

 

Y es así como Ale o Lola –como la conocen- se prepara física y mental, con estiramientos y control de los nervios, para conseguir con empeño el Campeonato Nacional del Sur; exigiéndose aún más para lograr, también, ir al Latinoamericano de mujeres a competir y estar en el pódium.

La pasión que siente por este deporte le ha dejado todo tipo de experiencias: la principal es la disciplina que, hoy por hoy, lleva a cabo en su vida cotidiana. “La libertad, la adrenalina y mucha felicidad son emociones que muy pocos conocemos al practicar el Motocross sin olvidar el apoyo que recibes de las personas”, ella comentó.


Es por ello que Alejandra es una BELLEZA EXTREMA que siempre encuentra una razón para motivarse y avanzar; quien tiene admiración por cada una de sus compañeras Riders; quien hace un reconocimiento especial a su papá Santiago Hernández Valenzuela y a su mamá Alicia Romero por ser su gran equipo, pilares durante sus 20 años de edad.

¿Por qué Motocross?

Mi papá me inculcó el amor por las dos ruedas solo que fui la primera mujer de la familia en sacar la casta en las motos y, en un futuro, espero, mis hijos continúen éste legado.

¿A qué edad te subiste a una moto?

Cuando cumplí 5 años, mi papá me regaló una honda semi automática de 3 cambios; me hizo muy feliz. Años después me compró una Kawasaki 65cc y a la semana fui a competir en la pista de Rafael Campos situado en la localidad de Canticas del Municipio de Cosoleacaque, Veracruz. En ese tiempo usé un casco vergonzoso, un pantalón muy gastado y botas prestadas; sin embargo fue más fuerte mi conmoción por correr que lo hice y, aunque quedé en último lugar y los demás pilotos me sacaron tres vueltas de 7 en total, terminé con saldo blanco.

¿Por qué escogiste el número 277?

Cuando me compraron mis papás la Honda 250 ese número lo tenía puesto; lo sentí especial, poco usado y hecho a mi medida.

¿Alguna fractura; dónde?

Sí, el dedo medio de la mano izquierda. Fue en una carrera en Xalapa en la categoría N2. Tuve una buena salida y al toparme con el primer obstáculo, no calculé bien y salí volando sin mi moto. Vi mi dedo mal colocado; me espanté, me bajó la presión y no pude continuar.

¿Cuál pista es tu favorita y por qué?

La de San Pablo Motopark en Oaxaca, Oaxaca. Es una pista muy amplia, cansada, con difíciles obstáculos pero muy segura.

¿Qué haces para prepararte previo a una carrera?

Entreno una o dos veces por semana porque debo trasladarme a la pista de mi amigo Rafael Campos en Canticas o a la pista de Acayucan. Intento también no comer en exceso y evito los alimentos altos en grasa, masas y la sal.


¿En qué forma tienes apoyo de la FMM?

Ninguna; todo es por cuenta de mi papá. Él es mi patrocinador, mi entrenador, mi apoyo incondicional.

¿Qué le pedirías a la FMM que aportara a la categoría femenil en México?

Me ha gustado mucho el orden que han llevado a cabo en las últimas carreras; ha estado bien planificado, seguro y divertidas, como piloto agradezco.

¿Qué les recomiendas a las mujeres que quieran entrar a competir?

Que se animen a vivir ésta gran experiencia porque lo adorarán. Que no se sientan menos por ser etiquetadas como el “sexo débil” porque sobre la marcha todo se puede lograr.

¿Podrías enviar un saludo a los lectores de parquecerrado.com?

Hola a todos los lectores de parquecerrado.com, les envío un cordial saludo y les transmito buena vibra. Por favor, todos sigamos apoyando a Mario Farfán #3.

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