Por: Carlos Gomezcésar & Armida Hernández

En tiempos del covid te presentamos la totalmente ecléctica Husqvarna Svartpilen 701.

Probamos la que es a nuestro parecer la moto más balanceada de la familia urbana de Husqvarna, la Svartpilen 701. Totalmente inspirada en las motos Flat track (disciplina de origen norteamericano en la que se empezó a competir en hipódromos, hoy en día existen circuitos especializados) totalmente minimalista a la vista con líneas sencilla y depuradas, aunque no por eso se queda corta en el apartado tecnológico y de seguridad.

Empecemos por los datos técnicos. Monta un motor mono cilíndrico de 692 centímetros cúbicos refrigerado por líquido con 75 CV y 72 Nm de par a 6.750 rpm con inyección electrónica de combustible. Nos sorprendió el jugo que se le puede sacar al motor desde el rango bajo hasta los medios altos.

Cuenta con un chasis multitubular que está construido con tubos de acero al cromo molibdeno que asegura una rigidez excepcional que junto con las suspensiones tanto delantera (horquilla invertida) como trasera (mono amortiguador conectado mediante un sistema de bieletas al basculante) firmadas por WP de 150 mm regulables en compresión y rebote, que en nuestras pruebas nos dio absoluta seguridad para tomar curvas o hacer cambios de carril.

En el apartado de los frenos cuenta con un disco de freno delantero perforado de acero con cuatro pistones y anclaje radial de 320 mm delante y 240 mm detrás, con sistema ABS firmado por Brembo y control de tracción (totalmente desconectables) que confiere una muy firme mordida al aplicarlos.

Con una transmisión de 6 velocidades y embrague anti rebotes con quick shifter tanto para subir o bajar marcha con cadena, nos impulsa rápidamente y con mucha soltura a desafiar los límites legales de velocidad.

El centro de información es igual al de su hermana gemela (totalmente minimalista) con la información básica necesaria; con la diferencia que éste presenta una inclinación hacia el conductor que hace más fácil la lectura y evita los reflejos del sol que las Vitpilen tienen.

Con 170 kgs y 13 litros de capacidad del tanque, es una moto más orientada a la ciudad; sin embargo, podemos hacer recorridos interestatales tomando en cuenta que carecemos de protección aerodinámica y que con el tiempo y el aire en nuestra contra se nos pueden llegar a cansar los brazos; la posición de manejo es natural y cómoda ya que el manubrio está en una posición alta en la que los brazos descansan y la espalda se mantiene en posición recta. Por la forma y el tamaño del asiento nos pareció un poco dura pero alcanzable para la mayoría de los pilotos.

Una de las ventajas con las que cuenta es que la iluminación es full LED que nos confiere una buena visibilidad de noche como de día para que los vehículos y personas nos vean fácilmente.

Sumando todo lo anterior es una motocicleta llevadera para el día a día, el nivel de potencia es suficiente para conducir con soltura en la ciudad que gusta de mantenerse en niveles altos de régimen por su carácter mono cilíndrico con un muy buen nivel de seguridad y con un estilo único que roba miradas a donde vayas.